La libre movilidad dentro de las cárceles, el acceso a información escrita, televisiva o radial y las visitas íntimas son tres de los beneficios que el partido ARENA propuso ayer que se suspendan a los reos hasta por seis meses.
Diputados del partido opositor, entre ellos Rodrigo Ávila, plantearon al gobierno incluir estas limitaciones en el proyecto de medidas excepcionales que evalúan para combatir a las pandillas y frenar la delincuencia.
También proponen que se les suspendan las visitas de sus familiares, disponer dentro de las prisiones de “locales adecuados y dignos para la realización de visitas familiares e íntimas” y hacer trabajos que les generen ingresos.
Ávila explicó que en vez de suspender por 15 días esas garantías que no pierden dentro de las cárceles aún siendo reclusos, se amplíe el plazo a seis meses.
Esta moción fue planteada ayer mismo al presidente Salvador Sánchez Cerén y su gabinete de Seguridad, y según Ávila, ha sido considerada por el Ejecutivo dentro de un paquete de medidas extraordinarias que les presentaron ayer a los partidos políticos.
Sin embargo, Ávila afirmó que por “motivos de seguridad” los diputados de la Comisión de Seguridad que asistieron a la encerrona no revelarían detalles.
Los legisladores se reunieron ayer en Casa Presidencial para conocer las medidas que estudia implementar el gobierno (leer nota aparte).
El plan de ARENA se denomina: “Disposiciones transitorias para decretar centros penales en Estado de emergencia”, y según otros legisladores areneros como Mauricio Ernesto Vargas, esta iniciativa sería una respuesta de corto plazo para detener los homicidios e ilícitos que son ordenados desde las prisiones por los delincuentes y cabecillas de pandillas.
La propuesta se suma a otra que en febrero pasado también presentó ARENA y que plantea una ley de “Defensa Social y abandono a la violencia”.
La medida que plantearon pretendía promover el retiro de miembros de pandillas, a efecto de facilitar su retiro de las estructuras criminales a las que pertenecen, posibilitando la desarticulación de éstas, así como promover la rehabilitación y reinserción.
Ávila dijo que así como se les aplicaría medidas de represión para que abandonen las maras, si es necesario también se debe hacer uso de “la fuerza” para que se rehabiliten y se reincorporen a la sociedad. También pidieron una ley de registro de pandillas.