Por medio de un acuerdo de Junta Directiva de la Asamblea, el pasado 2 de marzo, los diputados aprobaron más restricciones a la labor periodística durante las plenarias dentro del Salón Azul en el Palacio Legislativo.
En la nota firmada por la quinta secretaria de la Directiva, la diputada Jackeline Rivera, del FMLN, se gira instrucciones a la gerente de Comunicaciones de la Asamblea Legislativa, Ivette Morales, para que a partir de esa fecha “se restrinja” el “ingreso de fotógrafos, periodistas de Grupos Parlamentarios, asistentes de prensa de Diputados y Diputadas y medios de comunicación externos al área de Junta Directiva y Curules”.
Según la notificación, los únicos que podrán tener acceso directo a los diputados mientras se desarrollan las plenarias será el personal de prensa institucional de la Asamblea, quienes compartirán el material periodístico que “requieran dichos medios o las señoras Diputadas o Diputados”.
Lo anterior limita aún más la labor de los medios de comunicación que no son institucionales, ya que los comunicadores de cada grupo parlamentario apoyan a los periodistas externos para acceder a los diputados, ya que sí podían llegar hasta las curules para informarles cuando son solicitados para dar declaraciones sobre el quehacer legislativo y temas de coyuntura nacional.
Actualmente, los periodistas de los medios privados solo se pueden movilizar en uno de los pasillos del Salón Azul, así como en un área que recientemente ha sido acomodada con parlantes y un podio para las conferencias de prensa de los diputados, y en un espacio reducido en la entrada principal al recinto. De allí en adelante han colocado corta flujos que son custodiados celosamente por los vigilantes para que los periodistas no ingresen hasta las curules.
Hay también un área designada para la prensa, pero los diputados no llegan allí, y han destinado un espacio en el segundo nivel del Salón Azul desde el cual los fotógrafos y camarógrafos solo logran hacer imágenes generales de las sesiones legislativas.
Al enterarse del acuerdo sobre las restricciones, Moisés Urbina, director de El Noticiero, expresó ayer que llamaron a dos comunicadores de fracciones legislativas y a un diputado, quienes les informaron que el acceso a los medios de comunicación no variaba.
Sin embargo, Urbina consideró que el hecho de que los comunicadores parlamentarios no podrán colaborar con los periodistas para poder acceder a los diputados es un “bloqueo” a la prensa.
“Es un cierre a la prensa, viene en mal momento porque viene a concordar con muchas cosas (como señalamientos de) que los medios distorsionan realidades y hablan de situaciones que no son; es preocupante que el primer Órgano del Estado le ponga una puerta de vidrio que separa a los legisladores. Sería desastroso”, subrayó.
David Reyes, de ARENA, miembro de la Directiva, explicó que la idea no es coartar la libertad de prensa de los medios de comunicación que dan cobertura a las plenarias.
Reyes cree que se tomó la decisión, porque los camarógrafos y periodistas partidarios a veces dificultan el trabajo de los comunicadores institucionales.
Pero dijo que él es uno de los que más insiste en que las reuniones de la Junta Directiva sean públicas, ya que por hoy son a puerta cerrada y es la entidad donde se toman decisiones financieras y administrativas.
Sánchez Cerén interrumpe a periodista que cuestionaba a Munguía Payés por pornofiesta en penales