Madre recoge las monedas que quedaron a un lado de su hijo asesinado en Ciudad Delgado

Tres supuestos MS habrían atacado a un estudiante de primer año de bachillerato quien se dirigía esta mañana a estudiar al INFRAMEN

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Las autoridades reportaron el homicidio de un estudiante del Instituto Nacional General Francisco Menéndez. El hecho ocurrió durante la madrugada del 8 de marzo en el cantón San Lauriano

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08 March 2016

Muy conmovida por el asesinato de su hijo, la madre al llegar al lugar se forcejeó con los policías para que la dejaran pasar y estar un momento con su hijo que yacía muerto en una cuneta de la calle principal del cantón San Laureano en Ciudad Delgado.

Como los policías no la dejaron permanecer en la escena, la madre del joven estudiante no hizo más que recoger del suelo, unas monedas  que horas antes había entregado a su retoño de 15 años quien se dirigía a estudiar al INFRAMEN.

El asesinato de Carlos Ulises L. es el segundo que se registra en menos de una semana cuando otro pariente fue ultimado en la zona, afirmaron algunos parientes.

Carlos Ulises estudiaba primer año de bachillerato en el INFRAMEN y según la Policía ya había sido amenazado por sujetos de pandillas del sector.

La Policía ya capturó a uno de los presuntos homicidas, a quien apodan el Pirra y buscan a otros más que habrían participado de la muerte del estudiante.

Según un oficial, el asesinato se registró a las 6:20 de la mañana en momentos que tres sujetos de pandillas lo interceptaron y le asestaron varios disparos.

A este hora, las autoridades no tienen claro cuál pudo ser el móvil del crimen pero no descartan que sea un problema de rivalidades de pandillas, tras confundirlo supuestamente con un grupo rival.

Cantón San Laureano es un punto limítrofe entre las dos pandillas y estas tienden a confundir a las personas de un lado con el grupo delictivo que se moviliza en la zona aunque no tenga nada que ver, dicen los vecinos.

Varias personas han sido asesinadas en ese cantón por las mismas circunstancias, indican los lugareños.

El lugar del crimen es solitario, debajo de la carretera de Oro en el kilómetro 16 y de presencia de la MS.