Congestionamiento vial se generó ayer en la zona del redondel de Naciones Unidas, en Antiguo Cuscatlán, minutos después de ser inaugurado por vicepresidente de la República, Óscar Ortiz, junto a las autoridades de Obras Públicas, el paso vehicular en el túnel en la zona.
El tráfico se mantuvo pesado durante el mediodía sobre todo en los vehículos que se dirigían desde Antiguo Cuscatlán hacia La Libertad.
Sin embargo, las confusiones no solo fueron de ayer, ya que de ahora en adelante los automovilistas que de Antiguo Cuscatlán quieran incorporarse a Santa Elena ya no tendrán acceso directo al puente que los retornaba al carril de la autopista de la carretera Panamericana.
Ahora los conductores tendrán que desviarse a la calle El Pedregal y luego retornar sobre la carretera Panamericana y atravesarla con el tránsito vehicular pesado de la zona hasta el otro extremo.
El túnel tiene una dimensión de 440 metros de largo que empieza desde la Avenida Jerusalén para conectar con la autopista José María Cañas, o mejor conocida como carretera Panamericana.
El ancho del paso subterráneo solamente permitirá que circule un solo vehículo en el carril que va de Norte a Sur, el cual podría poner en aprietos a los automovilistas que se encuentren con un tráfico vehicular, o que un auto se quede por desperfectos mecánicos.
Pero según el ministro de Obras Públicas, Gerson Martínez, pese a la estrechez del túnel el diseño fue hecho dejando un espacio para que una grúa pueda ingresar al túnel a sacar a un automóvil en caso que llegue a tener desperfectos mecánicos y no arranque.
“Es un solo carril, el otro solo es un espacio para que se pueda mover una grúa si se queda un carro”, dijo.
Martínez enfatizó que el hecho que se haya habilitado el paso en la zona no implica que los trabajos hayan finalizado, ni que la empresa Econ haya entregado formalmente el proyecto al Gobierno.
“El contrato dice que en la segunda quincena de marzo debe entregarse, pero la empresa contratista y el Fovial han entregado antes de tiempo”, agregó.
El avance total de la obra es del 96 % y solo están por ejecutarse trabajos de señalización, la nueva calzada que se está añadiendo en terreno donde es la Escuela Militar y obras de ornato dentro del redondel.
El proyecto empezó a trabajarse desde junio del año pasado con las ampliaciones de la calle El Pedregal, parte de la calle Chiltiupán y 100 metros en la zona sur de la Avenida Jerusalén.
A principios de diciembre del año pasado, el Gobierno habilitó en tiempo récord los dos primeros pasos multinivel que conectan la calle Chiltiupán con El Pedregal y viceversa. El gasto que realizó el Fovial solo en este proyecto fue de $17 millones que se obtuvieron de la emisión de títulos valores que realizó en el 2013.
Licitarán construcción de paso Rancho Navarra
En el caso del paso a desnivel en la carretera que conduce al Aeropuerto Internacional, específicamente en la zona conocida como Rancho Navarra, la construcción podría licitarse dentro de dos meses.
Sin embargo, todavía falta que el MOP obtenga los derechos de vía que necesita para poder expandir la calle y realizar la obra.
“Hay una comunidad por ahí, pero hay que reubicarla; hay un entendido con los sectores privados de la zona, pero hay que formalizar los acuerdos”, sostuvo.
Sin embargo, primero tendrán que realizar la licitación del diseño, después la licitación de la obra física; y en caso que no se declarara desierta se llevarían otros 10 meses, aproximadamente, en ejecutarse el proyecto desde que se de la fase de arranque.
Eficiencia y resultado
La mayoría de la obra se ha entregado antes del tiempo previsto. Según Martínez, eso se debe a la responsabilidad que han adquirido las empresas y la exigencia que como contratistas públicos hacen para que entreguen un producto rápido, pero con las condiciones que exigen.
“Cuando una cosa se hace mal el que termina pagando es el país”, indicó.
Indicó que todas las empresas a las que se contratan para realizar obras públicas de gran o de menor dimensión son seleccionadas si cumplen con los requisitos que se disponen en la licitación y en la Ley de Adquisiciones y de contrataciones (LACAP)
“Hemos venido a romper con el favoritismo”, agregó.