El salario que ganaba Juan Antonio Hernández Oviedo en la Policía, no era suficiente para sostener a su familia y por eso, en sus días de descanso, trabajaba para una funeraria de La Unión.
La noche del lunes, el agente de 43 años se dirigió al caserío La Metaza, del cantón El Jagüey, en Conchagua, con la esperanza de vender un servicio funerario junto con otras personas.
En el trayecto fueron interceptados por pandilleros que los obligaron a bajarse del pick up que conducía el policía. A él lo retuvieron y lo asesinaron; a los demás los dejaron ir.
Desde hace varios años, Hernández laboraba en una sede policial de San Miguel, últimamente estuvo destacado en la Oficina de Atención Ciudadana.
Tras el homicidio del agente, hubo un operativo en el que fueron aprehendidos más de 10 sospechosos de haber participado en el ataque. Esta muerte violenta ha sido atribuida por las autoridades a la mara Salvatrucha.
Hernández se convierte en el séptimo policía asesinado en lo que va del año y el tercero, entre el viernes y lunes pasado.
El primer ataque fue contra el agente René Mauricio Alas, quien fue ultimado en la colonia Belén, de Apopa.
El agente, quien estaba destacado en Soyapango, fue acribillado cuando viajaba en un motocicleta rumbo a la vivienda de un pariente.
El domingo, también fue asesinado el policía Gerardo de Jesús Umaña, quien estaba destacado en la delegación centro de San Salvador.
La víctima fue sepultada ayer en el caserío Agua Fría, del cantón Las Mercedes, en Quezaltepeque, La Libertad.
En ese mismo lugar habitaba Umaña junto a sus familiares, quienes ayer fueron acompañados al entierro por decenas de vecinos.
El ataque contra el agente lo realizaron unos pandilleros que se escondieron entre los matorrales de la casa de la víctima y esperaron a que saliera a lavarse los dientes.
El director de la Policía, Howard Cotto, dijo el lunes en una entrevista, que Umaña es el primer policía asesinado en lo que va del año por ser integrante de la corporación. El resto de víctimas, según Cotto, fueron atacadas por razones personales u otros motivos.