¿E-books vs libros impresos en papel?

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10 March 2019

En lactualidad existen diferentes modalidades de lectura de libros. Libros impresos en papel (el libro tradicional por excelencia), los e-readers (específicamente diseñados para lectura de libros digitales) y el resto de dispositivos de pantallas planas que van desde computadoras, laptops, Smartphones, tabletas, etc.

Hace aproximadamente 20 años no existían las tabletas electrónicas, ni Smartphones, ni e-readers o dispositivos de lectura digital como Amazon Kindle, Barnes & Noble Nook, Sony, Kobo o IPad Readers que permiten la lectura de libros en formato electrónico. Todos hojeábamos libros impresos, muy a pesar que ya se utilizaban las computadoras y laptops. De pronto, a principios de este nuevo milenio, aparecieron los e-books. Los e-books o libros digitales son textos que se publican en formato digital.

Si visitamos Amazon.com, descubriremos que la mayoría de libros se venden en dos formatos, digital e impreso. Usualmente los libros digitales son vendidos a un menor costo. Es obvio que, ante semejante discrepancia de precios en el mercado, los ávidos lectores han ido sustituyendo los libros impresos por los e-books que “en un concepto ideal” deberían leerse en e-readers o dispositivos especiales para leer digitalmente. Sin embargo, los e-books se leen directamente en tabletas o Smartphones, dispositivos que no han sido diseñados para eso.

Las pantallas digitales, debido al uso de pixeles para componer imágenes y texto, causan una dolencia llamada el síndrome de visión por computadora. Esta afección tiene los siguientes síntomas: visión borrosa, tensión ocular, dolores de cabeza y sobre-estimulación cerebral que puede aumentar la dificultad de dormir. Aun utilizando e-readers, la sobre-exposición de nuestros ojos a dichas pantallas nos causa problemas en la vista. Comparativamente, los libros impresos no ocasionan dichos efectos nocivos. Aunque, los libros de papel son considerados como pasados de moda, más caros, imprácticos y pesados; hace unos años un equipo de científicos en Estados Unidos, encontró que los lectores de e-books son menos competentes en recordar los argumentos, tramas y eventos en comparación a los que utilizan los libros impresos.

Los mismos científicos no saben por qué esto sucede, pero pareciera que hay una conexión entre nuestro cerebro y el progreso psicológico, físico y sensorial que se logra al pasar las páginas y recorrer la historia visualmente en el libro de papel.

Adicionalmente, no sé si han experimentado lo siguiente: cuando nos ponemos a leer un libro impreso en papel, se dispara un efecto relajante que elimina el estrés.

Leer nos regenera, tanto como escuchar música o salir a caminar al parque. Con un libro de papel podemos pasar horas de horas sin ningún tipo de síndrome visual por computadora. Sin embargo, una pantalla digital puede anular este efecto relajante, e incluso causar más estrés, bienvenidos al mundo del estrés digital. Al leer conectados al internet, especialmente en la noche, se interrumpe el patrón de sueño normal, que es motivo de depresión y fatiga al día siguiente.

¡Qué irónico!, la lectura que debería ser una causa de descanso y desarrollo mental, si se hace en dispositivos electrónicos nos abre las puertas hacia el estrés digital. Además, leer electrónicamente puede fomentar otras distracciones (como redes sociales, chatear, explorar correo electrónico, ver videos, etc.). Dichas interrupciones afectan nuestra capacidad de concentración y comprensión del material leído. Finalmente, mientras el libro impreso en papel es vulnerable a daño por humedad, hongos-termitas o robo, los e-books pueden “hackear” nuestro dispositivo, pueden ser borrados o perdidos tanto como pirateados.

Quiero finalizar este artículo compartiendo lo que la periodista Lecia Bushak de Medicaldaily.com nos señala: “Los investigadores han estado examinando las diferencias entre la lectura de libros impresos y libros electrónicos durante años. Muchos de los estudios han demostrado que leer libros impresos tiene muchas ventajas sobre los libros electrónicos. No hay que subestimar la simplicidad de tener un libro impreso en sus manos, hojeando las páginas y concentrándose solamente en eso, sin tener otra cosa más que hacer. Al comprometernos con un libro clásico de papel, se obtiene la experiencia más completa y saludable”.

Fundadora de Eleonora Escalante Strategy

www.eleonoraescalantestrategy.wordpress.com