El Tribunal Supremo Electoral (TSE) realizará hoy a nivel nacional la última prueba del equipo humano y tecnológico, para verificar que todo funcione correctamente para el día de la votación presidencial del domingo 3 de febrero.
“Vamos a verificar todo el proceso, desde la distribución de logística, instalación (de equipos) en los centros de votación, apertura de los centros de votación, electricidad y conectividad a la red de internet, transmisión de resultados, verificación de la imagen de las actas, el sistema de cruzado de la información, la digitación anónima, la totalización y la divulgación de resultados”, explicó el magistrado del TSE, Miguel Ángel Cardoza.
Significa lo anterior que la prueba se hará desde cada uno de los 1,595 centros de votación distribuidos a nivel nacional y en ella deberá participar el personal del Tribunal encargado de transmitir las actas (transmisores) desde los escáner coreanos y las personas que recibirán los datos en el Centro Nacional de Procesamiento y Transmisión de Resultados Electorales (CNPRE) con sede en San Salvador.
Vigilantes de partidos darán seguimiento a datos en acta
Además participará el personal y los automotores que tendrán a cargo el traslado del personal, el equipo tecnológico y el material electoral hacia los centros de votación.
“Le llamamos simulacro porque es el cien por cien en todos los centros de votación, y es además respetando los horarios como si estuviéramos el día de la elección”, explicó a los periodistas el funcionario del TSE.
Última prueba
Según Cardoza, todo ese recurso humano y tecnológico será sometido a un trabajo bajo presión, con la finalidad de detectar falencias o fallas para corregirlas a tiempo.
“Haremos algunas pruebas contingenciales para ver cómo reaccionamos. Habrá prueba de estrés este fin de semana; para nosotros este fin de semana prácticamente es la prueba final”, apuntó Cardoza.
La primera prueba consistió solamente en la transmisión de las actas de escrutinio preliminar, pero se instalaron en solo 21 sedes a nivel nacional y solo se usaron 550 escáneres de los 1,800 que donó Corea.
La segunda prueba se desarrolló el 6 de enero anterior, aunque se tuvo que utilizar unos 200 escáneres que se encontraban de reserva pues una parte de ellos se consumieron en el incendio que se desató un día antes en el pabellón 4 del Centro Internacional de Ferias y Convenciones (CIFCO).
No obstante, la segunda prueba se desarrolló con normalidad y con éxito, según dijeron los magistrados del TSE.
Cardoza aseguró que aún no tienen el informe de la Fiscalía General de la República sobre los motivos del incendio.
Esta última prueba o simulacro de hoy se realiza a dos semanas de las votaciones del 3 de febrero para elegir al próximo presidente de la República.
Aún así, dentro de los planes de contingencia que tiene el organismo electoral se encuentra una prueba de ataque al sistema informático, con la finalidad de estar preparados ante un virtual ataque cibernético.
Sin embargo, las autoridades del TSE no entran en detalles sobre esta prueba, pues por la naturaleza de la misma, se realiza privadamente.