A 19 días de celebrarse las elecciones presidenciales, el Tribunal Supremo Electoral (TSE), realizó ayer varias pruebas a la tinta indeleble que será utilizada para manchar el dedo de las personas después de ejercer el sufragio, esto como garantía de que no votarán dos veces.
Los encargados de hacer la experticia fueron dos técnicos del laboratorio de Control de Calidad de la Universidad Salvadoreña Alberto Masferrer (USAM), bajo la supervisión de los miembros de la Junta de Vigilancia Electoral (JVE), entidad en la que están representados todos los partidos políticos.
Los especialistas de la USAM realizaron el análisis físico químico, el cual consiste en intentar remover la tinta del dedo con reactivos fuertes y de uso doméstico. Para ello usaron 35 componentes domésticos y químicos, entre ellos: el etanol, kerosene, thinner, ácido nítrico, lejía pura, tiocianato de amonio, benceno, alcohol etílico comercial, éter de petróleo, metanol y aguarrás.
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El técnico de la USAM, Ovidio Callejas, explicó que se verifica que el secado de la tinta se muestre a los 15 segundos y la coloración total luego de dos minutos de haber sido aplicada en el dedo del votante.
Además, se verifica que el diámetro del frasco de la tinta sea de 6 centímetros y la altura de 7 centímetros. Luego se cercioran que tenga una cinta de seguridad, instrucciones de uso y control de derrames.
Ana Marroquín, presidenta pro témpore de la JVE, explicó que ayer se realizó la segunda prueba a la tinta indeleble para garantizar que las elecciones serán transparentes.
En total son 10,500 frascos de la sustancia que serán empacados junto a los kit genéricos que se distribuirán en las elecciones.