¿A qué paz se refieren?

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20 December 2018

Somos Paz es el esfuerzo nacional más grande de la historia de nuestro país; pretende “vestir de blanco” a El Salvador durante enero. Su objetivo es poner de moda la PAZ, establecer cada enero como el mes en el cual los salvadoreños nos olvidamos de nuestras diferencias y reconciliamos con todos aquellos que piensan diferente a mí o me han ocasionado daño.

Salvadoreños de todas las edades me preguntan ¿a qué PAZ se refieren? o ¿cómo definimos la PAZ? Parecía que viviéramos en mundos paralelos hasta que llegué a entender que habíamos normalizado la violencia; por supuesto, es lo único que hemos conocido. Nadie que ha vivido en El Salvador jamás ha conocido la paz. Entendí que la mayoría de nosotros habíamos perdido nuestra capacidad de soñar en grande, en una realidad diferente.

Algunos puntos irrebatibles sobre nuestra realidad:

El Salvador legalmente tiene la concentración más grande de terroristas del mundo, muchos estiman que son 60,000, tres a cuatro veces la fuerza actual de ISIS.

Los índices de homicidio han bajado, pero continuamos dentro de los cinco países más violentos del mundo. Los asesinatos en El Salvador en 2018 llegarán cerca de 64 por 100,000 habitantes (más de 10 por 100,000 es considerado epidémico).

Soldados en las calles y medidas extraordinarias nos llevan por definición a ser un país inmerso en un conflicto de baja intensidad. Grandes porciones de nuestro país están asediadas, no existe libre circulación, hay extorsiones o “impuestos de guerra” y, por supuesto, las migraciones forzadas por causas de la violencia.

No discutiré el porqué de esta realidad más allá que anticiparles que son circuitos en nuestro cerebro, áreas básicas que se activan bajo estrés que no nos permiten pensar en el bien común, modos de sobrevivencia que nos traicionan y no nos han permitido llegar a la paz desde 1992.

Ante estas realidades uno pensaría que, en vez de tantas propuestas de campaña, lograr la paz en El Salvador debería de ser la primera, pero no lo es. Entendí que los candidatos y sus equipos también habían sido engañados por la biología. Ellos creen que El Salvador se enfrenta a un problema de delincuencia común.

Por consecuencia, es nuestra responsabilidad guiar el camino. Se me ocurre que si nos “vestimos de blanco” por un mes, entenderemos lo prioritario que debería ser la paz para todos, tanto para los que sufren violencia a diario, como para aquellos que tenemos el privilegio de solo sentirla a lo lejos y tenemos el tiempo de leer este artículo y todavía preguntar: ¿A qué paz se refiere?

Médico neurocirujano