Calleja ofrece dar subsidio de gas a 200,000 familias más

Son personas que necesitan el beneficio pero están excluidas del actual mecanismo del Gobierno.

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Carmen Aída Lazo y Carlos Calleja anunciaron ayer que optimizarán y ampliarán la cobertura de la entrega del subsidio al gas. Foto EDH / Josué parada

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10 December 2018

La fórmula presidencial de Alianza por un Nuevo País, compuesta por Carlos Calleja y Carmen Aída Lazo, se comprometieron en mejorar el mecanismo de distribución y entrega de subsidio de gas, mismo que ampliarían a 200,000 familias más.

Consideran que el actual mecanismo está dejando fuera a familias que en realidad lo necesitan. “Los salvadoreños que necesitan del subsidio del gas, lo van a recibir y de una forma ágil y fácil de cobrar, eso no está sucediendo ahorita”, afirmó Carlos Calleja.

Destacó además que en este momento hay vacíos en el proceso de entrega de subsidio de gas a los salvadoreños y eso lo hace engorroso y complicado para los salvadoreños.

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Según la fórmula hay unas 200,00 familias en situaciones difíciles como la pobreza y que actualmente no están gozando del beneficio, 55 mil de estas se encuentran en pobreza extrema.

El incremento de 200,000 personas le costarían al Gobierno unos $14 millones al año, esto saldría de la optimización del gasto del Estado. El monto de subsidio para el próximo año rondará los $75 millones.

Afirmaron además que los hogares que ya gozan del beneficio, pueden tener la certeza de que lo van a recibir cada mes.

Mejorar el sistema de entrega de subsidio representa unos $10 millones al año y podría ser menor si se supera la burocracia y los excesivos trámites en los que se ha incurrido.

Observaciones al sistema actual

El sistema de entrega de subsidio excluye a quienes lo necesitan y no cuentan con factura de energía eléctrica, además somete a los usuarios a trámites excesivos, afirman.

Entre las personas que están excluidas y que ellos tomarán en cuenta, están los aproximadamente 43,000 hogares que viven en mesones.

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Estas personas tienen que perder un día de empleo en acudir a la s Centros de Atención por Demanda (CENADE) para exponer su caso y recibir una cita tres meses después, para que les visiten en su hogar y poder constatar su situación socioeconómica.

Afirman además que se está dando una situación de clonación de pines de la tarjeta Solidaria, lo que provoca que cuando las personas llegan por su tambo de gas, el subsidio ya ha sido cobrado por otro.

Además están excluidos los hogares que consumen más de 200 kilovatios al mes y que a veces es porque vive más de una familia en la casa, afirma Lazo.

El estudio técnico realizado por el equipo de Alianza por un Nuevo País, coincide con lo que ya detallaba un estudio del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), que afirma que 40 % de los hogares que necesitan subsidio no lo tienen.

De ahí concluyen que el consumo de energía eléctrica no es el mejor indicador de la necesidad de un hogar y que se deben tomar en cuenta otros criterios que determinen de manera más exacta la necesidad de un hogar, como la ubicación geográfica de una casa.

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Entre las alternativas de pago de subsidio que propone la fórmula estaría depósito a cuenta o canjeable a puntos exprés, que permitan facilitar la entrega del fondo de subsidio.

Gobierno amplió subsidio

El Gobierno fue retirando el beneficio gradualmente, pero luego de los malos resultados del FMLN en las elecciones municipales y legislativas del pasado 3 de marzo, el Gobierno optó por incrementar la cobertura en 50,000 personas, anunció el Ministerio de Economía (Minec), a finales del mes pasado.

De acuerdo con los datos oficiales, las tarjetas solidarias han sido entregadas mayormente en San Salvador (18,048), La Libertad (5,902), San Miguel (3,900), Santa Ana (3,793) y Sonsonate (2,852), siendo estos, por ahora, los departamentos con el mayor número de personas que reciben el beneficio.

Según el Minec, desde abril, las oficinas y unidades móviles del Cenade han recibido más de 30,000 nuevas solicitudes de subsidio.

Durante noviembre el subsidio anunciado es de $6.00; de manera que, por ejemplo, por cada cilindro de 25 libras, el beneficiario paga $6.63; por uno de 35 libras, cuyo precio máximo es de $17.60, pagan $11.60, y así.